


OAN Staff
Jueves, 26 de junio de 2025
La Corte Suprema de los Estados Unidos dictaminó que Carolina del Sur tiene la autoridad para bloquear el financiamiento de Medicaid a las clínicas de Planned Parenthood, al determinar que la Ley de Medicaid de 1965 no otorga a los pacientes el derecho de demandar a los estados por descalificar a sus proveedores preferidos. El fallo fue aprobado este jueves después de una votación 6 a 3.
El dictamen permite al estado suspender el financiamiento público destinado a Planned Parenthood.
“Al igual que otros estados, Carolina del Sur cuenta con un proceso administrativo para que los proveedores impugnen su exclusión del programa estatal de Medicaid”, escribió el juez Neil Gorsuch en nombre de la mayoría.
“…la aplicación privada no siempre beneficia al público, especialmente porque exige que los estados desvíen fondos y atención de los servicios sociales hacia litigios. Equilibrar esos costos y beneficios plantea una cuestión de política pública que, bajo nuestro sistema de gobierno, solo el Congreso puede resolver”, continuó.
El gobernador Henry McMaster (republicano por Carolina del Sur) ha intentado impedir que los fondos estatales de salud lleguen a Planned Parenthood. Sin embargo, una residente y paciente de Planned Parenthood South Atlantic alegó que esta decisión violaba sus derechos bajo la ley de Medicaid.
Un elemento clave de la Ley de Medicaid de 1965 establece que los pacientes deben tener “libre elección de un proveedor” dispuesto y calificado. El caso giró en torno a si Planned Parenthood era un “proveedor cualificado” según la ley de Medicaid y si los pacientes tienen un “derecho” explícito a demandar para obtener acceso a su proveedor preferido.
Planned Parenthood South Atlantic ha sostenido que el caso no se trata del aborto, sino del acceso a la atención médica general.
Esta nota fue traducida al español por Patricia Mitchell de una versión en inglés.